DE TAL PEDRO TAL ASTILLA
Cuba, 1987. 82’.
Dirección: Luis Felipe Bernaza.
Guion: Luis Felipe Bernaza – Nelson Díaz – Raúl Rivero.
Fotografía: Adriano Moreno – Ángel Ramírez (C).
Montaje: Mirita Lores.
Intérpretes: Reynaldo Miravalles, Ana Viña, Nancy Gonzáles, Gilberto Reyes, Thais Valdés, Néstor Rivero, Hilario Peña.
Sinopsis: Pedro Quijano, popularmente llamado "Pedro Cero por ciento", es un campesino campeón en producción lechera y ganadera de las montañas de Escambray; tiene una familia compuesta por sus dos hijas: Carolina, quien siempre ha estado del lado de su padre y acompañándole en su labor, y Purita, una chica algo más rebelde, quien se enamora perdidamente de Lupecio, hijo del peor enemigo de Pedro, Vicente.
Reconocimientos:
Festival de Cine de Cádiz (España): Premio a la Mejor banda sonora.
Concurso Caracol - UNEAC, La Habana (Cuba): Premios de dirección y fotografía.
Revista Opina, La Habana (Cuba): Premio Girasol de la Popularidad.
“Muchas otras películas, como De tal Pedro tal astilla, intentaron, con diversa suerte, restituirle al cine su lugar como expresión del arte popular, y dialogar activamente con un público cada vez más amplio, en una suerte de anhelo manifiesto por instalar las películas cubanas en la preferencia absoluta de su público natural”
“De tal Pedro tal astilla nace de un documental realizado por el director Luis Felipe Bernaza llamado Pedro Cero por ciento, que levantó un poco de ronchas debido a que el campesino terminaba diciendo que su mayor aspiración era aprender a leer y escribir. […] así como la puesta en escena como comedia musical que hiciera Nelson Dorr en el Teatro Karl Marx, teniendo a Luis Lloro y a Elba Marquez como la pareja protagónica inspirada en los personajes reales de que habla el documental”
“Su vida, al amparo de los campos y saciada en sus horizontes, más sencilla y menos resabiosa que la pintada en la película De tal Pedro tal astilla que le dio fama, le ganó el cariño de los cubanos, le convirtió en ganadero emblemático y le enterró el nombre de Pedro Acosta Pérez, para rebautizarle irremediablemente con la seña de Pedro Cero por ciento, en clara referencia a que a él ningún animal se le muere por descuidos”